La obra titulada Aguadoras, del pintor español Josep Mongrell i Torrent, se inscribe en un periodo histórico de notable transformación en el arte español, abarcando los siglos XIX y XX. Este cuadro, que mide 29 por 39 centímetros, es un ejemplo significativo del uso de la técnica del óleo sobre tela, que permite al artista plasmar con gran detalle la vida cotidiana y las tradiciones del pueblo. La obra se encuentra registrada bajo el código I-M - 01 - 0009060 - 00000 en el inventario del Principado de Asturias, donde se incluye en la sección de pintura del inventario general. Aguadoras captura la esencia de un momento específico en la vida de las comunidades, donde las mujeres desempeñan un papel crucial como proveedoras de agua. La representación de estas figuras, que se han convertido en símbolo de resistencia y trabajo en equipo, se refleja en la atención meticulosa de Mongrell i Torrent a los detalles de sus rostros y posturas. El uso de colores y sombras en la obra contribuye a transmitir la atmósfera del entorno, sugiriendo la carga y el esfuerzo que implica la labor diaria de las Aguadoras.
La importancia cultural de Aguadoras radica no solo en su calidad artística, sino también en su capacidad para evocar un pasado que resuena en la memoria colectiva. Este tipo de representación artística es fundamental para entender el contexto social de la época, así como el papel que desempeñan las mujeres en la historia de las comunidades. La obra fue incluida en el Registro de Bienes de Interés Cultural, un reconocimiento que subraya su relevancia cultural y legal. La fecha de incoación del registro fue el 12 de mayo de 1988, y fue declarada oficialmente el 20 de septiembre de 1991, lo que asegura su preservación y difusión en el ámbito cultural del Principado de Asturias.
El organismo responsable de esta catalogación, el Principado de Asturias, trabaja para proteger y promover el patrimonio cultural de la región, asegurando que obras como Aguadoras no solo sean conservadas, sino también apreciadas por las generaciones futuras. La información que acompaña a esta obra, aunque proporcionada con fines informativos, es esencial para comprender su situación jurídico-administrativa y su lugar dentro del acervo cultural asturiano. En conclusión, Aguadoras de Mongrell i Torrent se erige como un testimonio valioso de la vida cotidiana y el trabajo de las mujeres, invitando a la reflexión sobre la historia y la cultura que nos conforman.