En el marco de la rica tradición artística de la Barroca española, una obra singular destaca por su relevancia histórica y estética: Acaymo presenta la imagen de Candelaria al virrey de Tahoro. Esta pintura, realizada en óleo sobre lienzo por la Escuela de Quintana como parte de la Serie de los Milagros de la Virgen, se erige como un testimonio visual del siglo XVIII.
La obra, única en su tipo, está inscrita bajo el código R-M - 01 - 0000551 - 00000 en el Registro de Bienes de Interés Cultural de Canarias, confirmando así su valor patrimonial. Incoada el 20 de abril de 1993 y declarada oficialmente el 19 de abril de 2005, su custodia y preservación son responsabilidad del organismo cultural canario.
La composición de la pintura muestra la destreza técnica característica de la época, capturando con maestría el fervor religioso y la devoción popular asociada a la figura de la Virgen de Candelaria. La narrativa visual, ejecutada con meticulosidad barroca, sitúa a Acaymo como protagonista de un acto trascendental: la presentación de la imagen de la Virgen al virrey de Tahoro, un gesto simbólico de poder y fe arraigada en la cultura canaria.
Este lienzo no solo ilustra un episodio histórico de importancia local, sino que también subraya la habilidad técnica y el significado espiritual que caracterizan a la pintura barroca española. Su inclusión en el Registro B.I.C. subraya su relevancia cultural y legal, asegurando su protección y estudio continuo para generaciones futuras.
En resumen, Acaymo presenta la imagen de Candelaria al virrey de Tahoro se posiciona como un tesoro artístico que no solo embellece el patrimonio cultural de Canarias, sino que también enriquece nuestro entendimiento de la historia y la devoción religiosa de la época barroca española.